Related Posts with Thumbnails

domingo, 24 de enero de 2010

Morocco 1º parte: Estrecho-Atlas

Espero que tengais un ratillo libre porque estais ante una entrada muy larga...
Un resumen de mis navidades en Marruecos, fueron 10 días, acompañado por Javier Talegón. Recorrimos unos 1.900 km, identificamos 87 especies de aves (19 nuevas para mi y al menos 3 subespecies), 8 mamíferos y algunos hérpetos aún pendientes de identificar.


¡África a la vista!


Una vez subidos al ferry, saqué mis prismas y me puse a avistar aves marinas. Gaviotas patiamarrilas, sombrías y reidoras me entretuvieron las primeras millas. Luego apareció la primera gaviota tridáctila, el primer alcatraz y varios págalos grandes que nos acompañaron gran parte del crucero.


Págalo grande Stercorarius skua


El baile continuó: Más alcatraces, gaviotas tridáctilas, un alca, más págalos, alguna pardela balear/mediterránea y varios paiños ¿de Leach!!?


¿Paiño de Leach Oceanodroma leucorhoa?



La guinda del pastel la pusieron unos chorros que delataron la presencia de al menos un Rorcual común Balaenoptera physalus


y un grupo de Calderones Globicephala melas


Una vez llegados a Tánger, pillamos billetes para un tren nocturno hacia Marrakech, el cual os recomiendo; pero, debeis coger "couchettes" que son literas. Así dormireis mientras viajais hacia el sur del país, más bello y menos "europeizado". Como el tren salía a las 21h., nos tomamos unos tés a la menta y recorrimos un poco la ciudad acosados por algunos marroquís que nos ofertaron de todo. Fue allí donde vimos nuestro primer leopardo...


Desgraciadamente, es común esta estampa en el país. En el local habia además dos cabezas de tigre, un meloncillo, varios cocodrilos, camaleones, etc.


Ya en Marrakech, avisté el primer Escribano sahariano, uno de los pájaros más comunes del país.


Escribano Sahariano Emberiza striolata sahari


Decidimos alquilar un coche y dirigir rumbo hacia el Atlas. Pero, no es así de fácil...Marruecos es uno de los paises con más siniestralidad en las carreteras del mundo. Durante todo el viaje fuimos adelantados en lineas continuas, curvas, cambios de rasante, etc.


Aún asi, regresamos sanos y salvos, aunque despues de varios sustos y volantazos.
Alejados de la ciudad, las aldeas nos delataban más acerca de la cultura bereber y nos dejaban estampas como esta.Por el camino, nos encontramos con un pájaro muy ruidoso y con un canto característico: el Bulbul naranjero. En navidades y ya estaba criando! Resultó ser una especie muy común durante todo el viaje.
Bulbul Naranjero Pycnonotus barbatus


Nos detuvimos en uno de los últimos pueblos antes del Atlas a comer un Tayín y fotografiar una colonia de Garcillas bueyeras que se hallaban en los nidos situados en un árbol en la misma carretera.
Garcilla bueyera Bubulcus ibis

Las cigüeñas Ciconia ciconia igualmente estaban emparejadas en el nido.
El camino tambien nos iba dejando otras instantáneas.


El Atlas estaba cada vez más cerca! Esta enorme Cordillera que se formó durante el Cenozoico a raiz de la colisión entre la placa Euroasiática y la placa Africana, recorre 2.400 km separando el océano Atlántico y el mar mediterráneo del desierto del Sáhara. De hecho, los montes arbolados del norte del Atlas contrastaron netamente con los paisajes áridos situados más al sur del sistema montañoso.
La fauna de montaña y roquedos tambien se hacia ver: collalbas negras, roqueros solitarios, colirrojos y chovas piquirrojas entre otras especies. Nosotros no dejábamos de escrutar el cielo atentos a la posible aparición del Quebrantahuesos.


Chova piquirroja Phyrrocorax phyrrocorax


Roquero solitario Monticola solitarius
La carretera serpenteante atravesaría a escasa distancia del Tizi-n-test (3080 msnm) tras dejar atras al pueblo de Asni y a nuestra izquierda al yabal Tubqal, el pico más alto de la cordillera y del norte de África con 4.167 msnm.
Os dejo con unas fotos que retratan la belleza de ese lugar.


.El paisaje se iba volviendo cada vez más forestal. En estas laderas de la alta cuenca del Nfiss, podemos observar una de las joyas botánicas de la región, el cipres del Atlas o ciprés marroquí (Cupressus atlántica), endémico de esta zona. Junto a los cipreses encontramos también una numerosa presencia de sabina negral (Juniperus phoenia), del enebro (Juniperus oxicedrus) y de encinas (Quercus ilex), que aparece siempre esporádicamente y nunca en gran número, a lo largo de toda la región. Merece también especial mención un arbusto endémico de esta región del Alto Atlas, asociado comunmente a los cipresales, que es la retama del Atlas (Retama dasycarpa), y que podemos observar incluso junto a las cunetas de la carretera.


Las casas, construidas en barro o en piedra, no tienen ningún tipo de impacto visual y se adaptan perfectamente al entorno. La vegetación de ribera está compuesta por chopos y almácigos (Pistacia atlántica)



Un cartel nos advirtió que desconocíamos la presencia de arruis en la zona (reservas de caza). Los ejemplares fotografiados en concreto estaban en el cercado de un centro de interpretación, aunque tímidos y detras de una pantalla de acacias. Pero tuvimos la suerte de observar uno con los prismas en la ladera opuesta en régimen de libertad. Pena de un teles!


Arruí Ammotragus lervia lervia
Antes de caer la noche, tuvimos la suerte de ver dos Ardillas morunas.
El atardecer nos dejaba unas preciosas instantáneas del yabal Tubqal. Es la única cima de Marruecos en la que es posible ver nieve casi todo el año.



La carretera que baja del Atlas hacia la costa se nos hizo tortuosa por el mal estado en el que se hallaba. Menos mal que no llovía! Aunque, un mochuelo nos alegró el viaje.
Esa noche dormimos en Taroudant; esta ciudad tiene la muralla de mayor recorrido y mejor conservada del país.
En el próximo post os contaré la estancia en el Parque Nacional Souss Massa, el más grande y visitado de Marruecos.
Espero os haya gustado.


Más info sobre Marruecos: aquí

sábado, 16 de enero de 2010

Lobos y corzos

Desde hace tiempo asistimos a una avalancha de quejas por parte de los tecores lucenses que recriminan al lobo un supuesto descenso de los corzos aludiendo a un aumento de lobos en la provincia, sin aportar datos de la variación de ambas poblaciones; una estrategia que consiste en crear desesperadamente conflictividad social para cazar lobos injustificadamente.
foto: Chisco lema (Corcubión)
Primeramente, debemos señalar que ante la presencia de un depredador como el lobo, las presas pueden modificar su conducta adoptando una mayor actividad crepuscular y nocturna, seleccionando áreas de mayor cobertura y pasando más tiempo vigilantes; lo que disminuye notablemente su detectabilidad y por tanto dificulta su observación. Este comportamiento es conocido como: The ecoloy of fear
Ante el desconocimiento de estos hechos, es de esperar que lo más fácil y absurdo sea denunciar una disminución falsa de corzos.

Curiosamente, en otros foros, los cazadores presumen de que en la provincia de Lugo hay una de las densidades más altas de corzo de toda la península ibérica. Lo cierto es que los costes económicos debidos a los atropellos de corzos y jabalies, muchas veces derivados de la realización de batidas, son muchos más cuantiosos que los propios daños causados por el lobo. Aunque este último sea el que soporta mala fama debido a una persecución mediática sin tregua.
Actualmente, el Plan de Gestión del lobo establece que a pese de ser una especie cinegética, sólo se autorizarán batidas o controles si se demuestran daños reiterados al ganado (hayan adoptado o no los ganaderos métodos de prevención) y en ningún caso es justificable matar lobos porque éstos cacen corzos, una de sus presas naturales.
ASCEL ya publicó anteriormente datos sobre la escasa repercusión de la especie demostrando que el lobo le afecta a menos del 0'092% del ganado doméstico en Galicia y que las enfermedades le causan infinitas más pérdidas al gremio ganadero que los daños de lobo, señalando que la polémica generada es disparatadamente superior a la realidad.
Se hace de nuevo patente el interés de los tecores lucenses por la injustificada caza de lobos, asi como ocurre desgraciadamente con otras especies como el zorro o los cormoranes.

Todo esto tiene lugar al margen de decenas de estudios científicos que inciden en las nefastas consecuencias que tiene la caza de grandes predadores para la ecología de sus poblaciones, de su viabilidad a largo plazo y de la propia salud de los ecosistemas donde habitan. La presencia de lobos en las zonas referidas por los cazadores recientemente no es ninguna novedad y no debe justificar ninguna autorización de caza extraordinaria.

lunes, 11 de enero de 2010

Zorzales

Tras regresar de la estancia navideña en Marruecos toca volver a habituarse al clima frío y húmedo del noroeste ibérico. Uno ya se había aclimatado a los 20ºC del valle del Draa. ;)
Cuando haya procesado los casi 4 gb de fotografías colgaré una entrada que resuma los 10 días de mi primer contacto con el continente africano. Pero como me conozco y soy un poco dejado tendré mientras que mantener el blog actualizado.
Llevo varios días babeando con las imágenes blancas de los blogs de los compañeros asturianos; en el suroeste gallego la nieve no se dejó ver. Echo bien de menos las nevadas anuales de mi infancia en Suiza...

Lo que me fascina es como la variación climática condiciona las aves que están presentes en el campo a cada momento; como ello se puede percibir en una superficie relativamente amplia (por ej. la cornisa cantábrica) y, como durante una misma mañana asturianos cántabros y gallegos pueden percibir que la noche anterior hubo entrada de Bisbistas, Avefrias, Limícolas o de Zorzales...como es recientemente el caso.


Estos días varios ornitólogos coinciden en la llegada de túrdidos a la península. Los árboles del río que rodean mi casa están llenos de zorzales que bajan a comer en los campos de maiz.

Ayer pude avistar un bando de una veintena de zorzales alirrojos muy desconfiados e inquietos
y un zorzal real.

Además, noté un aumento considerable de mirlos comunes en la zona, casi todos machos. Ya me comentara Emilio hace un tiempo que en una web holandesa habian visto un bando de casi un centenar de mirlos!
Sin el anillamiento es complicado afirmar si una especie es residente o si realiza algun tipo de migración.

Gracias al anillamiento, sabemos que algunos de nuestros zorzales proceden de Escandinavia, Gran Bretaña e Islandia. Este alirrojo fue anillado el año pasado, ojalá un compañero del norte de Europa confirme que sigue vivo.

Estas aves realizan movimientos anuales de más de 5.000 km y son dignas de ser protegidas. Desgraciadamente, los zorzales son especies cinegéticas y no reciben el trato que merecen.

Template Designed by Douglas Bowman - Updated to Beta by: Blogger Team
Modified for 3-Column Layout by Hoctro